En esta serie de lecturas de suspense especialmente diseñadas para alumnos de 9 años en adelante, a partir de 5º de Primaria, se destacan diversos aspectos positivos que contribuyen al desarrollo integral de los estudiantes. Al igual que en entregas anteriores de la serie, estas narrativas breves ofrecen a los alumnos la emocionante tarea de descubrir quién es el culpable o cuál fue la razón que condujo a su descubrimiento.

La inclusión de lecturas de suspense adaptadas para alumnos de 9 años en adelante en el currículo de Primaria no solo enriquece el aprendizaje, sino que también promueve habilidades cognitivas, sociales y literarias fundamentales para el desarrollo integral de los estudiantes. La combinación de desafíos intelectuales y la diversión compartida hace de esta experiencia una herramienta valiosa para estimular el amor por la lectura y el pensamiento crítico desde una edad temprana.

Habían pasado tres años desde que Francisco, Manuel, Juan y Roberto se habían reunido la última vez y desde entonces no se habían visto ninguno. En aquella ocasión uno de ellos había cometido un crimen en la misma siniestra casa en la que se encontraban ahora y Francisco lo sabía y estaba dispuesto a denunciarlo, y para ello había trazado un plan para desenmascararlo a la mañana siguiente.

A la llegada a la casa se fueron encontrando en el jardín, allí improvisaron una pequeña reunión de amigos, en la cual cada uno contó como le había ido durante esos tres años. Sin darse cuenta y sumergidos en su conversación se les fue pasando la tarde, hablando y hablando como si nada hubiera ocurrido entre ellos tres años atrás.

Fue el frío en el atardecer del día lo que les hizo darse cuenta de la hora y decidieron entrar en la casa para descansar y asearse un poco antes de la cena. Cuando se reunieron en el comedor la conversación continuó en el mismo punto en el que lo habían dejado una hora antes en el jardín. Después, Francisco y Manuel pasaron a la sala principal, en la planta baja de la casa, junto al calor del fuego de la chimenea, mientras que Roberto y Juan se retiraron a sus habitaciones, en la planta superior, indicando que se encontraban muy cansados del largo viaje que les había llevado hasta allí.

Al poco rato, inexplicablemente la luz se apago de pronto y la confusión se apoderó de todos, se trataba de una casa que no conocían bien y no sabían donde acudir para solucionar la avería. Sin embargo Roberto les tranquilizó sólo unos segundos después del apagón, al tiempo que encendía una vela en la sala principal donde Francisco y Manuel seguían de charla. Unos minutos después apareció Juan muy nervioso. Comentó que salió de su habitación inmediatamente después de apagarse la luz y que había tenido que descender con mucho cuidado, los dos pisos a oscuras, por miedo a rodar por las escaleras.

Aquella noche no volvió la luz y a la mañana siguiente Francisco no bajó de su dormitorio. Al principio no se extrañaron que se perdiese el desayuno, ya que era conocido por todos la fama de dormilón, pero a las diez y media de la mañana cuando habían quedado para dar un paseo a caballo, fueron a buscarlo a su habitación y se lo encontraron muerto en su cama.

La causa de la muerte había sido una dosis de veneno que alguien le había puesto en su taza de té antes de acostarse y había muerto mientras dormía. El Inspector Sánchez comprobó que los cables de la luz habían sido cortados y mandó registrar las maletas de cada uno de ellos, con el fin de intentar encontrar algún rastro del veneno, pero todo esfuerzo en este sentido fue inútil.

Ninguno de los tres tenía entre sus pertenencias ningún objeto que les hiciera parecer sospechosos y además todos se procuraron la mejor coartada que pudieron en tales circunstancias, explicando sus actos al Inspector, el cual sin embargo, pasados unos días mandó detener a uno de los tres acusándolo de asesinato.

DESCARGAR : «La escalera»

«Tras la pista» : «El apagón«. La Solución más abajo

¿Cuál fue el asesino? y ¿cual la razón de su detección? .  La solución puede estar en el texto y en el dibujo. Lee atentamente y observa el escenario de los hechos narrados. Para ayudarte a averiguarlo, sigue estos consejos.

1. ‐ Lee atentamente todo el texto.
2. ‐ No des soluciones sin pensar si tiene lógica o no.
3. ‐ No se trata de una juego de acertar, si no de razonar.
4. ‐ Si no logras encontrar la solución mira atentamente el dibujo y vuelve a releerlo.

• SOLUCIÓN: Para comprobar la  solución, seleccionar y arrastrar el ratón hacia abajo. Aparecerá el texto oculto.

• El Inspector se dió cuenta que era imposible que Roberto tardara sólo uno desgundos en bajar los dos pisos a oscuras desde su habitación, mientras que Juan tardó varios minutos  en bajar a tientas y a oscuras por la escalera y sin encontrarse a Roberto en las mismas. Además tenía preparada una vela, lo cual no era lógico si no conocian bien la casa.

Este recurso se publicó originalmente y por primera vez, en actiludis.com el 15/12/2008