Lectura para detectives. Un cuento para Nomola
Felipe Gutierrez profe en el CEIP el Olivar de Rivas en Vaciamadrid (Madrid), y creador del blog “Rinconcitos de lectura“ nos regala una nueva historia detectivesca del Inspector Joe Nomola a la que Silvia Asuero le ha añadido preguntas de comprensión lectora con las que además de trabajar la lectura ayuda a resolver el caso.
Puedes hacer la lectura y las preguntas de comprensión desde el blog o descargar la lectura para imprimir. La solución al caso la debes descargar a parte de la lectura y al final tienes enlaces con más lecturas de detectives.
DESCARGAR: “UN CUENTO PARA NOMOLA”
DESCARGAR: “UN CUENTO PARA NOMOLA – SOLUCIÓN«
Estas últimas navidades estaban siendo muy tranquilas. La lluvia golpeaba en los cristales y un viento desapacible ululaba tras la ventana.
Lentamente dejé caer un libro que estaba leyendo y me dispuse a echar una cabezadita en el sillón de mi oficina.
Toc, toc… alguien llamó a la puerta.
-Jefe, tiene visita. Una señorita quiere verle.
-Ricky, siempre tienes que venir en el momento más inoportuno.
Apareció una chica joven, con un rostro aniñado, como de unos veinte años.
-Buenos días, señor Nomola. Necesito hablar con usted con urgencia.
Llevaba un anorak rojo con capucha. Colgado del brazo , un bolso o más bien una cesta pequeña de mimbre.
¿De qué cuento se habrá escapado esta muchacha?
– ¿En qué puede servirle, señorita…?
– Red ,Red Riding Hood. Se trata de mi abuela. Mi querida abuela Mildred.-Y sacó un pañuelo para enjugarse una lágrima.
– ¿Qué le pasa a su abuelita?
– Pues que ha desaparecido.
Pensé que teniendo una nieta tan cursi no era extraño que la abuela saliera huyendo.
– ¿Qué edad tiene su abuela?
– Ochenta y ocho años.
– No es una edad para correr aventuras, desde luego.
– Nada de aventuras. Estoy totalmente persuadida de que alguien la ha secuestrado o algo peor…Y volvió a sacar su pañuelo para secarse una lágrima invisible.
– ¿Por qué está tan segura señorita de que…?
- Pues porque jamás sale de su casa desde hace más de veinte años.
- Puede que alguien la haya sacado de paseo.
- Eso es imposible; no tiene a nadie en el mundo excepto a mí.
- ¿Y cuándo se ha dado cuenta de su ausencia?
- Hoy mismo cuando he ido a visitarla. Precisamente le llevaba unas cosillas en estas cesta.
- ¿No me diga que le llevaba una jarrita de miel?
- Disculpe, pero lo que le llevo a mi abuela no es en absoluto de su incumbencia.
Decididamente aquello tenía que ser una broma . Una especie de Caperucita Roja, con su cestita, toda de punta en blanco, excepto, quizá sus zapatos, algo manchados. Busqué alguna cámara oculta. Luego me dije que lo mejor sería quitármela de encima.
– Señorita Riding, ¿Dónde vive su abuela?
– En la Avenida Perrault,34. Cerca de aquí. Es un piso antiguo.
– ¿Y dice que viene usted de allí?
– En efecto. Cuando me di cuenta de la desaparición bajé a la calle y vi que en la misma esquina estaba la comisaría de policía.
– ¡Ajá…ya veo! ¡Ricky, deja de escuchar tras la puerta y acompaña a esta señorita a tomar declaración.
Había perdido ya las ganas de dormir mi siesta, así que encendí un cigarrillo y me puse a darle vueltas a aquel extraño caso. Incomprensiblemente me quedé dormido. Más tarde llamé a mi ayudante.
– Ricky, ¿ya se fue la señorita cursi esa?
– Sí, jefe, aquí tengo su declaración. Señorita Red Riding Hood. Veinte años. Vive sola, es huérfana. Su abuela y ella son las únicas personas que quedan de la familia. Parece ser que la vieja, quiero decir la abuela, debe tener una gran fortuna, varias casas y una cuenta en el banco con bastantes ceros.
– ¿Todo eso te lo ha contado ella?
– Noooo, he hecho varias averiguaciones con mi amigo Charly, ese que trabaja en el banco de aquí al lado.
– ¿Aquel sinvergüenza que trató de colocarme esas acciones basura..?
– Bueno, jefe, nobody is perfect…
– ¿Qué más sabe tu amigo el del banco?
– Nada que la señorita de la cestita es la única heredera de la vieja, que por cierto es una tacaña de tomo y lomo.
– Vamos, que no le suelta un duro a la nieta.
– Ni aunque la maten…Bueno…jefe es un decir yo no quiero con esto…
– Ya, ya, te entiendo. ¿Y dices que tiene varias casas?
– Sí, además de la de la Avenida Perrault, tiene una casa en el campo. Cerca del Bosque Charmed, ya sabe, en la carretera de Filadelfia…
– No tengo ni idea. No acostumbro a visitar bosques encantados, prefiero mi barrio. Una cosa…¿Acompañaste a la señorita hasta la puerta?
– No la vi salir desde la ventana de mi despacho.
– Y…¿te fijaste si al salir se iba andando o cogió un taxi o algo…?
– Sí. Alguien la estaba esperando en un coche oscuro.
– ¿Alguien?
– Sí, un tipo extraño, barbudo, con mucho pelo…
– Vaya, vaya, Caperucita y el lobo. Bien, Ricky creo que tengo la solución a este caso. Vamos a hacer una excursión. Pero antes, barre este despacho está lleno de barro, pero no lo tires a la basura, recógelo y guárdalo en una bolsa.
1.- Contesta estas preguntas par averiguar la solución de este nuevo caso:
a)¿Quiénes son Mildred, Ricky y Red?
b) ¿Por qué fue la señorita al despacho de Nomola
c)¿Dónde vivía la abuela?
d) ¿Por qué estaba la nieta tan segura de que había sido secuestrada?
e) ¿Qué fortuna poseía la abuela
f) ¿Quién recogió a la neta cuando salió d ella comisaría?
g) Piensa un poco porque aquí están “las pistas”:
- ¿Hacia dónde se dirigirían la nieta y el acompañante?
- ¿Por qué Nomola hizo barrer, recoger y guardar en una bolsa el barro de su despacho?
2.- Haz una descripción detallada de la nieta y dibújala.
3.-Utiliza el diccionario: busca y escribe los significados y haz una oración de cada una de estas palabras: ULULABA – ENJUGABA
4.- Busca en la lectura y escribe todas las palabras que lleven algún prefijo. Rodéalos.
5.- ¿A qué cuento tradicional te recuerda esta lectura?
6.- Escribe el nombre de otros cuentos tradicionales.
7.- De todos los que has escrito, elige tu preferido y haz una ficha con estos datos: Título, autor, personajes principales, personajes secundarios y resumen.
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Este contenido se publicó por primera vez en actiludis.com el 10/01/2016
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